La OMS recomienda su consumo diario por sus múltiples beneficios, ya sean crudas, al vapor, hervidas o asadas.
Al igual que las manzanas, comer zanahorias crudas ayuda a fortalecer los dientes y las encías. Además, el flúor, presente en las zanahorias, espinacas o manzanas, es un mineral fundamental para cuidar el esmalte dental.
También se recomienda consumir zanahorias, como parte de una dieta blanca o suave cuando la persona esta atravesando una infección estomacal, siempre cocidas, ya sea en sopas o papillas. Gracias a su alto contenido en fibra, ingerir zanahorias calma las molestias gástricas y el exceso de acidez.
Como parte de una alimentación preventiva, las zanahorias y los arándanos son diuréticos y ayudan a la desintegración y eliminación de los cálculos renales.
Es el mejor alimento para la salud de la vista, debido a los betacarotenos, que protegen la retina y evitan la aparición de cataratas. Cuando se tiene problemas de visión es ampliamente recomendable el consumo diario de zanahorias preferiblemente en zumos. Asimismo, fortalecen y revitalizan las uñas y el cabello.
Algunas sugerencias de como incluir zanahorias en la alimentación de tu familia:
En El Desayuno:
- Prepara un zumo de zanahorias simple o con beterragas.
- Prepara un jugo de zanahoria, papaya y naranja.
En El Almuerzo:
- Deleita a tus niños con una crema de zanahorias, decorada con queso rallado o papas fritas al hilo.
- Elabora fritos o tortillas de zanahoria rallada cruda, brócoli cocido, queso y un poco de harina y huevo.
- Para variar el típico puré de papas, licua 2 zanahorias con un poco de leche y agrega a la mezcla del puré.
- Que nunca falten zanahorias en tus sopas y ensaladas.
- Como acompañamiento, cuando prepares pollo al horno, en la misma fuente coloca bastones de zanahoria, pimentón y espárragos, sazona con un poco de sal, pimienta y aceite de oliva.
Ahora, que ya sabes las bondades de comer zanahorias, asegúrate de que no falten en tu hogar.